"La venganza es un plato que se sirve mejor frío".

Toda la historia de Kill Bill está centrada en el tema de la VENGANZA (realmente empieza con la frase que he escrito arriba): La Novia persigue su venganza contra los que la traicionaron, ¡y nada puede pararla! El poder de Black Mamba, su determinación, su habilidad es increíble, y tú no puedes que estar de su parte, y suportarla en su misión. De hecho, matará a un montón de gente para obtener su objetivo. Pero la sensación que tengo es que parece la cosa más justa del mundo. Por lo que ha sufrido, La Novia tiene que obtener su venganza, el resto no importa. Voy a escribir una cita de la película que particularmente me gusta:

"Cuando la fortuna te sonríe al llevar a cabo algo tan violento y feo como la venganza, es una prueba irrefutable no sólo de que Dios existe, sino de que estás cumpliendo su voluntad".

Y me gusta mucho que Tarantino haya asignado este papel a una mujer, tan poderosa e invencible. Es como para decir: ¡cuidado hombres! Porque si vais a herir a una mujer, su venganza podrá ser terrible!
Desde el punto de vista del estilo...pues, ¡yo pienso que es fabulosa! Ante todo, la historia no está contada en orden cronológico (ya lo he dicho, es una peculiaridad de Tarantino) y al principio no entiendes muy bien lo que está pasando, sobre todo en el primer Volumen, pero luego los hechos se aclaran...y es increíble su habilidad en hacer esta especie de “juego”.
El director aquí utiliza todo su inmenso conocimiento cinematográfico, y hace muchísimas referencias a otros géneros: por ejemplo el primer Volumen es un homenaje maravilloso a las películas japoneses de artes marciales y de kung-fu. De hecho, hay un montón de escenas violentas de luchas que enseñan esas artes. Son escenas particularmente sangrientas, pero también tan absurdas y exageradas que son voluntariamente no creíbles, irreales.
El segundo Volumen hace referencia también a los spaghetti-western de Sergio Leone, y es mucho más “tranquilo” que el primero, con menos violencia y más reflexión.
Muchísimas escenas de esta obra han devenido cultas en la memoria del espectador.
Todavía no he hablado de los actores: todos son muy buenos, en particular, por supuesto, la protagonista Uma Thurman, que aquí para mi ha hecho su mejor interpretación de siempre.
Otro componente fundamental que ha contribuido al gran éxito de la película es seguramente la música . Aún no he hablado de la relación muy estrecha entre la música y Tarantino, y espero hacerlo muy pronto porque es muy interesante. Pues aquí también las canciones elegidas por el director han devenido leyendas.